Atenas participará de un triangular organizado por 9 de Julio de Río Tercero, entre el viernes y el domingo.
En la primera jornada, los verdes enfrentarán a San Martín de Marcos Juárez y el sábado se medirá con el conjunto anfitrión. El domingo jugarán los dos elencos cordobeses del TNA.
Atenas aprovechará el certamen en Río Tercero para probar a Jarred Merril, el nuevo extranjero, y además Rubén Magnano buscará que el equipo siga buscando rodaje de cara al inicio de la próxima Liga Nacional, el 7 de octubre venidero (ante Quimsa de Santiago del Estero). De todas maneras, el entrenador de los griegos pretendía que los rivales sean elencos de la elite.
Los verdes debutarán en la Liga el próximo 7 de octubre, cuando jueguen el partido que inaugurará oficialmente el torneo ante Quimsa de Santiago del Estero en el Orfeo Superdomo.El Nuevo Refuerzo
“El dinero no es todo...”, cantan Los Auténticos Decadentes. Un tema, y por supuesto un grupo, totalmente desconocido para Jarred Merril, el 80º refuerzo extranjero que contrata Atenas en su historial. No obstante ello la letra de la canción parece representarlo y “pintarlo” tras su decisión de emigrar a Argentina. Porque de otra manera no se entiende por qué este ala pivote tejano próximo a cumplir 28 años (el 5 de diciembre) abandonó la cotizada y apacible Premier League de Bahrein, donde los “petrodólares” crecen en la arena de su desierto por una competencia de salarios más bajos y de roces más rigurosos.

Pero, más allá de todo lo que pueda especularse, el jugador está en Córdoba, donde arribó al mediodía de ayer lunes procedente Estados Unidos y por la tarde fue el primero en ponerse la ropa de entrenamiento en el polideportivo Cerutti, bajo la atenta tutela del utilero Jorge “el Bocha” Pérez.
Merril se calzó una vincha blanca y luego de la sesión fotográfica se apresuró para tomar con sus largos dedos una pelota. Quizá intentando familiarizarse con una de las pocas cosas que hay en común entre Córdoba y su anterior destino en Al Manana, un equipo de la capital del pequeño país del Golfo Pérsico, con apenas 700 mil habitantes. Todo lo demás es nuevo para él. No es indiferente cambiar, no sin antes dejar atrás un mundo donde gobierna la realeza de la familia de Al Khalifa, de mezquitas, de religión islámica por una región de gente más cálida, desprejuiciada quizá y mucho más apasionada por el deporte. Un verdadero contraste.
Las palabras justas
“No hablo español”, fue una de las pocas frases que dijo en nuestro idioma. Pero al traducir sus declaraciones en inglés, Merril dejó entrever cómo se enteró de lo poquísimo que sabe de Córdoba y Atenas. “No sabía nada, lo poco que pude averiguar lo hice por Internet. Ahí me enteré que fueron campeones en la última temporada y que es un club con gran historia”, dijo.
–¿Por qué decidiste venir a jugar esta Liga?
–Me interesó venir a un club ganador dónde, por referencias, sé que hay muy buenos jugadores.
–¿Sabés de su exigencia?
–Sí, sé que es muy física, muy fuerte, pero creo que funcionaré.
–¿Cuáles son tus características de juego?
–Me destaco por mi tiro exterior, en dar buenas asistencias y también en el juego defensivo.
Luego sonrió cuando se le consultó que si estaba al tanto de las exigencias que tendría con el nuevo entrenador. “Sí, –dijo entre risas– me comentaron, pero está bien que así sea. Trataré de hacer mi trabajo y darle prioridad al equipo”, agregó.
La práctica asomaba. Rubén Magnano daba sus primeras indicaciones y Merrill comenzaba moverse. Dejó entrever soltura, mezcla de audacia con versatilidad.
Quedan pocos días para verlo y para despejar las dudas que ya nadie quiere tener.