Atenas conquistó una victoria bien valiosa, esas que dejan un significado especial. En un duro, luchado y disputado partido, los verdes superaron al campeón de la Liga Nacional, Libertad de Sunchales, por 75 a 65 y alargó las distancias en la cima de las posiciones. Además de la envergadura del rival, el triunfo adquiere más preponderancia porque la estrella cordobesa, Leo Gutiérrez, apenas jugó 11 minutos y dejó la cancha resentido de la lesión en el aductor.
Los griegos acumulan 16 victorias consecutivas en la Liga, y si mañana le ganan a Ciclista Olímpico alcanzarán la marca de Peñarol, con 17 en cadena.
La sobresaliente actuación de Bruno Lábaque, en un duelo sin igual con Sebastián Ginóbili, fue decisiva para el festejo de Atenas. El base se destacó con 26 puntos, y estuvo acompañado por la enorme tarea de Djibril Kante (11 tantos y 13 rebotes).
Al partido hay que dividirlo en dos partes. El primer tiempo fue flojo, aunque muy disputado, pero con los protagonistas de ambos equipos más pendientes de protestar la impresentable tarea de los árbitros que de jugar. A los griegos le alcanzó para mandar en el tanteador con escasos minutos de buen básquetbol cuando llevó la pelota a la pintura, en el cuarto inicial a Kante (4 puntos) y en el segundo período a Diego Osella (8 tantos). En el resto de los 20 minutos se dejó tentar por la defensa zonal de Libertad y abusó de los lanzamientos de triples (3/16). La visita, de la mano de Andrés Pelussi siempre se mantuvo cerca.
En el segundo tiempo afortunadamente todo cambió. Los dos elencos mejoraron, y mucho. Se dedicaron a jugar y dieron un espectáculo de gran nivel. Sobresalió el duelo entre Lábaque y Ginóbili.
El base cordobés anotó 12 tantos en el tercer segmento y el bahiense (chiflado por el público todo el cotejo) respondió con 13. Y los actores de reparto comenzaron a aparecer y Atenas sacó ventaja. Cristian Romero, quien no había hecho pie en los 20 minutos iniciales, se destacó en los dos costados, con 14 tantos, 6 recobres y 2 recuperos, y luchó palmo a palmo contra la experiencia de Pelussi.
Y también Kante dio la cara, anulando a Jason Osborne (él jugador del rival para Rubén Magnano) y adueñándose de los rebotes.
Y el duelo de los máximos favoritos, Atenas volvió a festejar.
SINTESIS
Cancha: Polideportivo Cerutti.
Parciales: 1°) 18-16, 2°) 34-31, 3°) 59-48.
Arbitros: Fernando Sampietro-Juan Fernández.
Público: 2.300.
Figura: Bruno Lábaque-Djibril Kante-Sebastián Ginóbili.
"Salimos adelante"
La figura de Atenas, Bruno Lábaque, resaltó la importancia de la victoria para dejar atrás la derrota del Súper 8. “Contra Obras perdimos culpa mía. Tenía muchas ganas de revertir el momento, de jugar y de ganar, y es importante para salir adelante”, contó Lábaque, aliviado.
Respecto a su juego comentó: “El base tiene la responsabilidad de la conducción y el otro día fallé en eso. Tuve una mala noche y me hago cargo, pero por suerte el equipo demostró que tiene reacción y ahora pensamos en seguir creciendo”.
En relación a su duelo con Sebastián Ginóbili, Lábaque destacó que “fue lindo, los dos jugadores somos fuertes, nos gusta jugar de esa manera, pero todo bien. El empezó muy derecho para el aro, yo lo pude emparejar y la suerte quedó en nuestras manos”. Sobre el récord de 17 victorias que puede alcanzar mañana, Bruno dijo: “No pensamos en eso. Vamos a igualar esa marca y ojalá lo superemos, pero la mejor manera es despejarse de ese objetivo es jugar cada partido como una final más”.
Por su parte, Juan Manuel Locatelli exclamó: “Fue durísimo. Hay que pintar el tablero porque lo abollé a bombazos. La lesión de Leo (Gutiérrez) nos obligó a cambiar nuestra forma de jugar y atacar. Bruno (Lábaque) jugó bárbaro, fuimos justos ganadores”.
Leo no se curó
Leonardo Gutiérrez apenas jugó 11 minutos y dejó la cancha, tras un rebote, resentido de la fuerte contractura en el aductor de la pierna izquierda, sufrida 10 días atrás. Hoy será sometido a estudios para analizar los pasos a seguir.
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